sábado, 24 de marzo de 2007

5. - El Silencio como técnica.

Tú eres todo, la diferencia está en la mente.
¿Cuál es la diferencia entre sentirTe y pensarTe?
¿Por qué contestar siempre?
¿Por qué río y no sonrío?
¿La tristeza de las palabras o la alegría del silencio?
Te llamo, siempre te llamo, pero estás aquí:
“tan cierto como el aire que respiro,
tan cierto como la mañana se levanta...
Si piensas que "el otro" te distrae, no comprendiste nada.”
Si no puedo sentir, estoy afuera. Fuera.
El te dice "Te amo" y tú inventas palabras para no sentirLo.
Sentirte.
A veces "el otro" te habla y tú inauguras un discurso; ¿y si el otro sólo quiere que lo sientas?
Tú me miras, yo hablo. Tú me hablas, yo no te miro.
¿Qué es lo permanente? ¿Y lo transitorio?
¿De dónde vengo? ¿Quién soy? ¿Cuál es la meta?
¿Si no es ahora, cuándo?
¿Cuántas palabras necesito para el viaje?
Si no respondo estas preguntas, no entendí nada.
6. - Conclusión.
Silencio no es sinónimo de mudez.
La técnica del silencio es el silencio.